Leah Carlson- El Centro y Museo Internacional de Derechos Civiles (ICRCM, por sus siglas en inglés) planea ampliar su oferta y programas con la compra de una edificación adyacente a sus instalaciones y ya logró el compromiso de subvención de la Junta de Comisionados del Condado de Guilford; sin embargo, el dinero no irá oficialmente al museo hasta que el contrato oficial este esbozado y el condado vote una vez más.
También el Ayuntamiento de Greensboro aprobó este miércoles una subvención por $2 millones para la compra de la edificación. Se trata de un espaldarazo de la Ciudad que permitirá a la institución cultural avanzar en sus planes de ampliación y en su postulación como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
La subvención de la Ciudad establece algunas estipulaciones: el primer millón de dólares se entregará en un pago único, mientras que la entrega del millón restante (que se pagará fraccionado en cuotas de 250 mil dólares durante cuatro años) estará supeditada a un informe detallado sobre la integridad del edificio. Asimismo, dependerá de que el museo obtenga fondos de otras entidades para la compra de la propiedad.
Por su parte, la Junta de Comisionados decidió a favor el 18 de marzo durante su retiro de dos días en el parque Bur-Mil. Melvin Alston (presidente de esta instancia legislativa y cofundador de la organización sin fines de lucro Sit-In Movement Inc., que ideó y convirtió en realidad el museo) no participó en la presentación hecha por el equipo del museo ante los comisionados. Esto se debe a que de acuerdo con la ley estatal, dado que Alston es parte interesada, se debe mantener completamente al margen de las discusiones sobre la financiación.
También, el ICRCM recibió un descuento de $250 mil para la adquisición de la propiedad de $10,5 millones ya que Alston se rehusó a cobrar la comisión de un cuarto de millón de dólares que le correspondía, dado que su agencia de bienes raíces –The Alston Realty Group – fue el agente del comprador en la transacción.
El plazo para reunir los fondos para la compra de la edificación, cuyo costo asciende a $10,25 millones, es corto y se necesita asegurar $5 millones para el 31 de marzo. La solicitud del museo contemplaba que la Junta de Comisionados del Condado de Guilford y la Ciudad de Greensboro otorgaran, cada uno, una subvención. Algo que avanza a pasos agigantados.
Asimismo, según informaron los comisionados a los medios, hay conversaciones en curso para reunir el dinero adicional que se necesita. Además, otras instituciones como la Fundación Joseph M. Bryan de Greater Greensboro y el estado de Carolina del Norte también podrían contribuir con la gran ampliación del museo.
Según declaraciones de la directiva del museo a medios locales, la compra de la propiedad es de vital importancia para la postulación de esta institución cultural como Patrimonio de la Humanidad de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés). Sólo hay 24 sitios que han recibido esta designación en Estados Unidos, entre ellos la Estatua de la Libertad, el Gran Cañón y el Parque nacional de las Grandes Montañas Humeantes.
El museo está ubicado en 134 S Elm St, en el reconocido edificio Woolworth del centro de Greensboro, donde el 1 de febrero de 1960 cuatro jovenes estudiantes negros de la Universidad Estatal Técnica y Agrícola de Carolina del Norte (NC A&T) realizaron una sentada (forma de protesta no violenta que implica ocupar asientos o sentarse en el suelo de un lugar, en general público) en la barra (mostrador) de un establecimiento de comida sólo para blancos. Esta acción desencadenó una lucha por los derechos civiles que tuvo eco en todo el mundo. Los cuatro estudiantes eran Franklin McCain, Joseph McNeil, Ezell Blair Jr. (ahora Jibreel Khazan) y David Richmond.
Voceros del ICRCM aseguran que la designación como Patrimonio de la Humanidad, que ocurre sólo después de un riguroso proceso de postulación y aprobación, significaría un gran impulso para el turismo en el condado. La institución está incluida en el Registro Nacional de Lugares Históricos y es un sitio destacado en la Ruta de los Derechos Civiles de EE.UU. También forma parte de la Coalición Internacional de Sitios de Conciencia.
Aunque el museo experimentó un descenso de los ingresos por turismo en 2020 con el inicio de la pandemia, logró un retorno inmediato del público cuando reabrió sus puertas en septiembre de ese año con servicios ampliados y diferentes formatos de visita.
El ICRCM atrae más de 70 mil visitantes al año y cuenta con 35 mil pies cuadrados de exhibiciones, incluidos artefactos originales y espacios interactivos, es uno de los hitos más emblemáticos en la lucha por los derechos civiles en Estados Unidos y tiene como misión preservar y ampliar su tarea educativa sobre uno de los movimientos culturales más significativos del país.
Además, esta institución cultural otorga reconocimiento, no solo a todos los activistas que participaron durante seis meses de las sentadas de Greensboro (hasta que acabo la segregación racial en el mostrador del establecimiento de comida el 25 de julio de 1960), sino también a luchadores locales y nacionales que han contribuido significativamente en el avance de los derechos humanos y civiles.